La Tierra Santa vuelve a verse envuelta en un clima de violencia y sufrimiento desde que el pasado 7 de octubre el grupo terrorista Hamás atacara con misiles a Israel, y atentara contra civiles, tomando rehenes israelíes.
Tanto el papa Francisco como los Patriarcas y los Jerarcas de Jerusalén se han pronunciado sobre esta situación mostrando su solidaridad con todas las víctimas y sus familiares, y pidiendo que se restablezca la paz, pues ni el terrorismo ni la guerra conducen a ninguna solución. «La guerra es siempre una derrota que alimenta el odio, la violencia y la venganza», ha dicho el Papa.
Queremos mostrar nuestra cercanía a todas las familias que en España experimentan el dolor y la preocupación por sus familiares que habitan en Tierra Santa.
Una vez más cristianos, judíos y musulmanes hemos de elevar nuestras oraciones para que puedan abrirse los cauces del diálogo y la fraternidad en medio de este conflicto, que enfrenta a hermanos, independientemente de su nacionalidad, etnia y fe. Que esta oración conforte a los miembros de las distintas comunidades religiosas que trabajan día a día por hacer de la Tierra Santa un Santuario de Paz y Fraternidad.
Por último, invitamos encarecidamente a todas las parroquias y comunidades religiosas, siguiendo la petición del Patriarca de Jerusalén, a unirnos en una jornada de ayuno, oración y penitencia por la paz en Tierra Santa el próximo 17 de octubre.
Subcomisión Episcopal para las Relaciones Interconfesionales y el Diálogo Interreligioso
+ Francisco Conesa Ferrer, Presidente
Rafael Vázquez Jiménez, Secretario